En una vista desgarradora, un perro mascota grita de agonía mientras cientos de espinas crecen en su boca, causando un dolor y sufrimiento inmensos.

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Thor, un perro de Sao Paulo, Brasil, fue encontrado con cientos de púas atravesando su cuerpo, causando angustia a su dueño, Adriano Bertoline. El hocico, la frente, la nariz, las orejas y las patas del perro de color marrón dorado estaban cubiertos de púas amarillas, como se ve en las imágenes que circularon en línea.

Adriano, que actualmente estaba desempleado, recurrió a las redes sociales en un intento desesperado por buscar ayuda cuando no podía pagar la factura del veterinario. Su petición llamó la atención de un concejal local llamado Dr. José Roberto Apolari, quien decidió intervenir y brindar ayuda.

Thor, de tres años, se había encontrado con un puercoespín por segunda vez en un año, lo que le provocó graves heridas por las púas. El llamamiento online de Adriano tenía como objetivo encontrar una clínica o un veterinario que pudiera ayudar a tratar a su querido perro, a pesar de sus limitaciones económicas.

Publicando en Twitter, Adriano escribió: “Buenos días amigos… Me desperté esta mañana y descubrí a mi perro en esta condición… ¿Hay alguna clínica o veterinario que pueda ayudarlo? Me temo que no puedo pagar”.

El doctor José Roberto Apolari, descrito como un ángel en la vida de Thor por Adriano, vio el ruego y decidió intervenir. El concejal llevó a Thor a una clínica, cubrió los gastos y se aseguró de que el perro recibiera los cuidados necesarios antes de devolverlo a casa.

Esta no era la primera vez que Thor se encontraba con un puercoespín. Según Adriano, en febrero de 2021, un amigo que trabajaba en una clínica veterinaria privada había ayudado a tratar las heridas de Thor en un encuentro anterior.

Se desconoce el destino del puercoespín tras el ataque del perro, lo que deja dudas sobre si sobrevivió o sufrió alguna herida. La historia de Thor sirve como recordatorio de la compasión y la bondad que pueden surgir ante la adversidad, cuando personas como el Dr. José Roberto Apolari extienden su apoyo a quienes lo necesitan, sin importar sus limitaciones financieras.