Rufus, el canguro rescatado, insiste en acurrucarse diariamente en el sofá con papá

Hoy les traemos la historia de un canguro rescatado llamado Rufus que simplemente adora descansar en el sofá viendo televisión y abrazar a su padre humano. Este canguro perezoso fue rescatado cuando solo tenía ocho meses. La madre adoptiva de Rufus, Kym Haywood, dirige el Santuario Patch Kangaroo en Boston. Aunque Rufus ya es un adulto, su obsesión por el sofá no ha terminado. El canguro tiene incluso su lugar favorito en el sofá.

Este adorable canguro entra por la puerta trasera todas las noches para poder tener una sesión de relax en el sofá frente al televisor. No es tarea fácil para Kym llevar al canguro a la cama, ya que a Rufus le encanta permanecer en su posición favorita. Imágenes de video del canguro lo muestran desplomándose en el sofá y enterrando su cabeza cuando su madre adoptiva le dice que es hora de dormir.

Aunque los dueños humanos intentan sobornarlo con uvas para sacarlo del sofá, el inteligente canguro acepta las uvas pero vuelve a dejarse caer en el sofá. Sus dueños ya ni siquiera pelean por el espacio en el sofá. Simplemente se alejan más en el sofá a medida que el canguro crece. Aparentemente, ese lugar es todo de Rufus. Cuando la gente viene a su casa, les dicen que nadie puede sentarse en el lugar de Rufus ya que está reservado para él.

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Los dos humanos, Kym y su marido Neil, sacrifican el espacio de su sofá por el canguro que ha estado con ellos desde que tenía sólo ocho meses. Pero están más que felices de hacerlo porque aman a Rufus y disfrutan pasar el rato con él todos los días. Cuando el canguro comenzó a descansar en el sofá, los dos humanos creyeron que era la cosa más linda que jamás había existido. Definitivamente Rufus es un canguro único que adora el sofá, allí se siente seguro.

Incluso mira un poco de televisión en el sofá y cae en un sueño profundo en su lugar seguro. Aunque los padres humanos no sacaron a Rufus del sofá, lo cubrieron con protectores de colchón para evitar contratiempos. Su mamá y su papá adoptivos aceptan cualquier cosa que lo haga feliz. Rufus se pone de mal humor a veces cuando no quiere que los dos humanos se sienten a su lado. Luego los empuja fuera del sofá con mucha suavidad.

Crédito de imagen y más información; rufusthecouchkangaroo/instagram  |  facebook  |  YouTube