El pequeño cachorro había sufrido una herida punzante en el trasero y debido a la lesión ya no podía caminar. A pesar de la herida, el perro estaba decidido a vivir.

Usó lo último que le quedaba de fuerzas para arrastrarse fuera de la carretera y ponerse a salvo, pero no pudo hacer mucho más. Probablemente ese hubiera sido el final de su historia, pero llegó la ayuda.

Los rescatistas levantaron suavemente al perrito y, a pesar de sus gritos de miedo y dolor, lo llevaron a un veterinario. El equipo médico de Animal Aid Unlimited inmediatamente le dio algunos analgésicos y le recetó reposo en cama y mucha “buena comida”.

No estaba claro qué tan bien se recuperaría de sus heridas el perro, al que llamaron Twinkle, pero le dieron la mejor oportunidad de luchar para volver a caminar.

Twinkle era bastante tímido al principio y no confiaba mucho en las personas ni en otros perros. Sin embargo, recibió mucho amor y atención del equipo de Animal Aid Unlimited y poco a poco empezó a salir de su caparazón.

A medida que comenzó a sanar y su movilidad comenzó a mejorar, ¡comenzó a volverse más sociable y juguetón! ¡No pasó mucho tiempo antes de que estuviera corriendo y jugando con otros perros!

Ahora es como un perro completamente diferente. Puede caminar y correr como otros perros y es cariñoso y juguetón. Ojalá encuentre el hogar perfecto para siempre.

Mira su transformación en el siguiente vídeo: