CIUDAD DE MÉXICO (Reuters) – Un equipo de arqueólogos descubrió los restos fosilizados de la cola de un dinosaurio de 72 millones de años en un desierto del norte de México, dijo el lunes el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Además de estar excepcionalmente bien conservada, la cola de cinco metros (16 pies) fue la primera encontrada en México, dijo Francisco Aguilar, director del INAH en el estado fronterizo de Coahuila.
El equipo, formado por arqueólogos y estudiantes del INAH y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), identificó el fósil como un hadrosaurio o dinosaurio con pico de pato.
La cola, encontrada cerca del pequeño pueblo de General Cepeda, probablemente equivalía a la mitad de la longitud del dinosaurio, dijo Aguilar.
Los arqueólogos encontraron las 50 vértebras de la cola completamente intactas después de pasar 20 días en el desierto levantando lentamente una roca sedimentaria que cubría los huesos de la criatura.
Los hallazgos de colas de dinosaurios son relativamente raros, según el INAH. El nuevo descubrimiento podría mejorar la comprensión de la familia de los hadrosaurios y ayudar a la investigación sobre enfermedades que afectaban a los huesos de los dinosaurios, que se parecían a los de los humanos, dijo Aguilar.
Los científicos ya han determinado que los dinosaurios padecían tumores y artritis, por ejemplo.
Se han encontrado restos de dinosaurios en muchas partes del estado de Coahuila, además de en otros estados desérticos del norte de México.
“Tenemos una historia muy rica de paleontología”, dijo Aguilar.
Señaló que durante el período Cretácico, que terminó hace unos 65 millones de años, gran parte de lo que hoy es el centro norte de México estaba en la costa. Esto ha permitido a los investigadores desenterrar restos de dinosaurios tanto marinos como terrestres.
La presencia de los restos fue reportada al INAH por lugareños en junio de 2012. Después de las inspecciones iniciales, la excavación comenzó a principios de este mes. Los restos de la cola serán trasladados a General Cepeda para su limpieza y mayor investigación.
(Edición de Dave Graham y Philip Barbara)
